Consternados por esta lamentable y trágica noticia nuestra organización social UNDECA, condena enérgicamente el tráfico y la venta de órganos.
Es totalmente repudiable que clínicas y hospitales del sector privado, que han venido promoviendo el turismo médico en nuestro país para lograr demanda internacional, en el campo de la salud, haya llegado a estos extremos inhumanos.
Es inaceptable que este sector empresarial privado haya venido practicando aparentemente el tráfico para la venta y compra de órganos de manera oculta y violando las disposiciones de salud pública del país, aprovechándose de las necesidades o el oportunismo de las personas.
No puede permitirse bajo ninguna circunstancia que este sucio negocio prevalezca, porque sería condenar a morir a los pacientes de la CCSS que necesitan trasplantes y que esperan desde hace varios años sin lograrlo.
Los presuntos responsables de estos actos bochornosos deben ser investigados hasta las últimas consecuencias, más aún si son especialistas y profesionales públicos, por lo que exigimos a las autoridades de la Caja, actuar con la mayor diligencia.
Los diputados y diputadas están obligados a actuar con total transparencia, actitud firme y responsable para erradicar este flagelo con el proyecto de ley que se encuentra en esa Asamblea y por el bien del los intereses nacionales y la credibilidad del país.