Es muy fácil, cuando no se trabaja en las mismas condiciones y no se tiene objetividad, decir que un paro de labores en la cocina puede ser irresponsable.
Ante esta posibilidad UNDECA aclara que el paro de labores en la cocina del Hospital San Juan de Dios obedeció a un acto absolutamente humano en defensa de la vida de pacientes y trabajadores ante las pésimas e inhumanas condiciones de la misma.
Las condiciones de los servicios de nutrición de muchos centros hospitalarios del país, durante muchos años, pero aún más ante el recorte presupuestario que han sufrido hospitales, el abandono y la poca planificación y atención por parte de las autoridades de la Caja Costarricense de Seguro Social, CCSS, que pone en riesgo la integridad y la vida tanto de pacientes como trabajadores.
Estas deprimentes condiciones laborales, que desde hace mucho se vienen denunciando, provocan que se acorte la vida laboral de trabajadores y trabajadoras. La artritis, problemas de columna, enfermedades respiratorias, son tan solo algunos de los padecimientos que a diario afectan a las personas que trabajan con empeño, dedicación y responsabilidad en los servicios de nutrición.
Por otra parte la falta de equipo, el mal estado de otro, la falta de agua caliente que esterilizan los utensilios y permite brindar a los pacientes seguridad de que no se contagiarán de otras enfermedades, son elementos fundamentales que vienen fallando en muchos centros del país.
Específicamente, en el Hospital San Juan de Dios, se está en alerta roja por el Clostridium y se deben tomar todas las medidas necesarias para evitar su propagación, incluyendo esta que muy posiblemente no se había tomado en cuenta.
Resultados del paro y negociaciones
La correcta y valiente actitud de los trabajadores, en defensa de la vida de pacientes y la suya propia, dejó como resultado una serie de acuerdos con las autoridades del Hospital San Juan de Dios.
1. Se instruye a la jefatura para que en 8 días presente informe de distribución de trabajo para reforzar y fortalecer el equipo de personal técnico y profesional programado sábados, domingos y feriados.
2. Se garantiza la remodelación de la cocina y construcción de un nuevo edificio para el servicio de nutrición del hospital. En 15 días se presentará el proyecto.
3. La administración garantiza la habilitación de agua caliente para el lavado y esterilización de utensilios de cocina a partir del día 30 de mayo a las 11:00 a.m., y monitorear su perfecto funcionamiento.
4. Las autoridades se comprometen a reparar y reemplazar la máquina lavadora de vajilla y su respectiva instalación en un plazo de 90 días y así garantizar el buen estado de los alimentos.
5. En 30 días se analizará la propuesta, surgida del estudio entre autoridades del hospital y los trabajadores, para cambio de equipo de cocción de alimentos.
6. Las autoridades se comprometen a comprar y reparar los carros de traslado y servicio de alimentación a los pacientes.
7. La administración se compromete a resolver el problema del desagüe de agua de la cocina que provoca estancamiento y malos olores en la cocina.
8. La administración se compromete al mejorar e instalar extractores e iluminación en el servicio de nutrición.
Como puede apreciarse en el listado de acuerdos todos los puntos están íntimamente ligados a resolver la deplorable condición del servicio de nutrición y evitar la contaminación que expongan la vida de pacientes y trabajadores.
Esperamos que las autoridades asuman responsablemente el cumplimiento de este pliego de acuerdos.
Un paro de labores que beneficiará directamente a los y las pacientes, ¿es justo verdad?