FSM: «Aspiramos a la unidad por principio, pero con principios»


Estimados compañeros de la Presidencia, compañeros todos:

Al propósito de poder proclamar la existencia de la Federacion Sindical Mundial 70 años atrás, contribuyó la unitaria Central de Trabajadores de America Latina, la emblemática CTAL.

Años después, en la inauguración del X Congreso Sindical Mundial celebrado en La Habana en 1982, el líder histórico de la Revolución Cubana, el compañero Fidel, se refería a este asunto medular expresando, y cito: “….A lo que nos une, y no a lo que pueda separarnos, es a lo que debemos mirar en esta difícil y peligrosa coyuntura. Sin que nadie tenga que renunciar necesariamente a sus posiciones, estamos convencidos de que el movimiento sindical mundial puede avanzar hacia el diálogo, hacia la búsqueda de los caminos de la unidad y hacia pasos concretos de acción común, sobre la base del objetivo supremo que identifica a los sindicatos en todos los continentes: la defensa de los intereses de los trabajadores y de sus pueblos…..” Fin de la cita.

Arribamos a nuestro 70 Aniversario esforzándonos, en la America Nuestra, por hacer realidad los sueños de unidad de los que dieron vida a la FSM.

Por supuesto, aspiramos a la unidad por principio, pero con principios. No puede ser una unidad para fortalecer ideales y actitudes que no son los nuestros sino, por el contrario, para, basada en nuestros valores, sirva para promoverlos, difundirlos, extenderlos. Una unidad que rechazando el sectarismo, nos amplíe.

Poco después de celebrado el XV Congreso Sindical Mundial en La Habana – determinante en sacar a la FSM de su debilidad y desidia – fueron promovidos por la FSM los Encuentros Sindicales de “Nuestra America” aportadores al avance de la FSM en nuestra región sobre la base de la UNIDAD EN LA ACCION”.

El ESNA, antimperialista, anticapitalista, clasista, es una contribución a los empeños de unir fuerzas no solo en el movimiento sindical, sino también juntando voluntades con los trabajadores auto gestionados, los desempleados, los despedidos, los campesinos, los indígenas, los sin tierra, con los desposeídos, los desamparados y pobres; con todos aquellos que, en fin, reivindicando justicia, luchan contra los poderosos que nos oprimen.

La “barbarie” capitalista, compañeros, ha llegado a situaciones extremas. Su antídoto, el socialismo, avanza en nuestra región evocando la alternativa proclamada antes de la existencia de la FSM: “O socialismo o barbarie”.

Esa batalla entre el pasado opresor y el futuro esperanzador por el que luchamos, se hace cada vez más aguda en nuestra región.

Expresión de ello son nuestros compañeros que sufren o han sufrido persecución, maltratos, torturas, represión o los brutalmente asesinados; nuestros compañeros presos injustamente o que lo han sido en Paraguay, Colombia, Guatemala, México.

¡Libertad para Julia Amparo Lotan, Vicepresidenta de la FSM y su Coordinadora en Guatemala; para Huber Ballesteros, uno de los líderes del Equipo FSM en Colombia y nuestros hermanos paraguayos; Rubén Villalba, Simon Bordón, Agustín Acosta, Roque Rodriguez, Basiliano Cardozo y Arístides Vera!

Compañeros: La trampa en que está trabado el mundo capitalista sigue siendo la misma. Las políticas económicas que generen desigualdad social seguirán conduciendo al capitalismo a un callejón sin salida.

No pueden resolverse los problemas del capitalismo con más capitalismo. No hay otra alternativa que transformar la realidad que nos asfixia.

Los capitalistas quieren, como nunca antes, también en America Latina y El Caribe, una nueva generación de trabajadores que sea flexible, barata y sometida propugnando su adaptación a métodos de explotación similares a los del sistema esclavista y feudal. Menguan nuestros derechos hasta desaparecerlos. El desempleo, generado por su caduco sistema, contribuye a esta nefasta realidad.

Está además el trabajador impedido de reclamar y si lo hace, es expulsado hacia la centrifuga adonde son desechados los que “sobran” o los que se rebelan. La consigna reaccionaria de que el mejor sindicato es el que no existe, es, no solo proclamada así mismo en nuestra región como en otras latitudes, sino vilmente aplicada.

La filosofía del pluralismo sin límites, como única forma de libertad sindical, la política de concertación de clases y la entrega de los intereses de la clase trabajadora a los del capital internacional, repercuten negativamente en la afiliación sindical, en el número de sindicatos y en su capacidad de lucha.

En respuesta a ello los trabajadores latinoamericanos, formando parte de sus pueblos, han contribuido a que cada vez en más países, se proclamen gobiernos que tienden a encontrar respuesta a los agobiantes y ancestrales sufrimientos populares.

El movimiento sindical clasista, el de lucha, el revolucionario, históricamente a la vanguardia de los procesos de cambio, no podría estar hoy a la zaga de las transformaciones que avanzan.

Pero somos conscientes de que no se puede cambiar un sistema desde el gobierno, se requiere, para ello, alcanzar el poder aun por conquistar en la mayoría de nuestras naciones.
“….Para nosotros no se trata de reformar la propiedad privada, sino de abolirla; no se trata de paliar los antagonismos de clase, sino de abolir las clases; no se trata de mejorar la sociedad existente, sino de establecer una nueva….” Tal legado de Marx y Engels tiene hoy plena vigencia como banderas de nuestras luchas.

La atmósfera de trasformaciones en “Nuestra América” en la búsqueda de la justicia social que merecemos, ha favorecido el avance de la FSM permitiendo avizorar que el futuro de progreso en America Latina y El Caribe, lo es, asimismo, de la Federacion Sindical Mundial.

El sindicalismo vacío de ideas nada tiene que aportar al desarrollo de la America Nuestra que construimos.

Compañeros, conscientes de que o nos unimos o perecemos, se constituyó, exitosamente, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, la CELAC.

Respaldada por la FSM, constituye un hecho histórico de extraordinaria significación estratégica para los destinos de nuestra región.

Pero a nuestro juicio el mayor enemigo de nuestra integración, lo es el modelo de desarrollo impuesto porque asfixia. Si a la larga no es derrotado a nivel regional y dentro de cada uno de nuestros países, no habrá integración y seremos cada día más dependientes.

Abogamos porque la CELAC avance hacia un paradigma regional que rebase las diferencias, privilegie nuestra comunión de intereses y necesidades, impulse la acción solidaria y amplíe la cooperación y la solidaridad tal y como va logrando la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBATCP) surgida como antídoto a la derrota del ALCA que promovía el imperio; hazaña cuyo 10mo. Aniversario próximamente celebraremos.

Tenemos que defender la Declaración por la CELAC de America Latina y El Caribe como Zona de Paz. Los cambios que avanzan en “Nuestra América” no son, por supuesto, del agrado de los que han ostentado secularmente el control de nuestras economías y recursos y han quebrado, en aras de sus intereses, la democracia que hipócritamente proclaman.

Somos testigos de las agresiones de todo tipo sufridas y que en la actualidad padecen los pueblos y gobiernos de algunos de nuestros países con los cuales pedimos este Simposio se solidarice. Estamos obligados a mantenernos alertas y dispuestos a sumar fuerzas en el enfrentamiento a las agresiones del imperialismo yanqui y sus acólitos en su pretensión de revertir lo avanzado e imponer su modelo devastador.

Persisten, compañeros, en nuestra región, pese a los avances logrados, serias limitaciones en el plano sindical. Somos conscientes de que para enfrentarlas se requiere, ante todo, de una diáfana militancia clasista la que supone ser ajenos a los “embrujos”, a las “seducciones” de un tipo de sindicalismo que confunde y que con su dinero corruptor compra conciencias como si fuesen mercancía generando “mercenarios sindicales” que venden los intereses de los que se dicen representar.

El daño que este sindicalismo de abdicación provoca, es particularmente perjudicial en los jóvenes que al arribar al trabajo por lo general no conocen la historia y experiencias del movimiento sindical; no saben por qué y para qué este surgió; desconocen, sin ser su culpa, la existencia de clases antagónicas con intereses irreconciliables. Educarlos es un deber impostergable.

Nuestros XV y XVI Congresos Sindicales Mundiales propiciaron, indudablemente, un fortalecimiento del movimiento sindical clasista en la America Latina y El Caribe pero pese a ello, aún tenemos complejos desafíos.

Un ejemplo lo es la necesidad de incrementar las batallas en el seno de las Empresas Transnacionales que nos esquilman, nos depauperan acumulando cada vez más riquezas en medio de la crisis del capitalismo. Tenemos que coordinar empeños sindicales en su interior coordinados con los sindicatos de sus matrices.

La labor sectorial que debemos dinamizar a través de nuestras valiosísimas Uniones Sindicales Internacionales – a cuyas direcciones aquí presentes saludamos fraternalmente – no solo puede ayudar a este propósito antimonopólico, sino además aportar a una mayor influencia en las organizaciones sectoriales de base nacionales disminuyendo, hasta destruir, la influencia de enquistadas cúpulas sindicales traidoras de los intereses de los trabajadores en sus países.

La ofensiva capitalista obliga a una permanente batalla por defender los derechos conquistados con nuestras luchas. Ello está condicionando que nacionalmente cada vez dispongamos de menos tiempo y recursos para contribuir a las acciones que exigen de nuestro concurso en el ámbito internacional. Es algo que tenemos que neutralizar conscientes de que las batallas de uno tienen que ser de todos si queremos que triunfen.

No podemos pasar por alto, compañeros, el decidido apoyo que la Secretaría de la FSM para la America Nuestra ha recibido del movimiento sindical clasista en la región. En particular es de destacar el aporte decidido de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) y de la Central de Trabajadoras y Trabajadores de Brasil (CTB) que con tanta pasión ha acogido esta magnífica celebración de nuestro 70 Aniversario.

Obligado también es reconocer la inspiración que nos ha proporcionado en la región la fuerza dinamizadora del Secretariado de la FSM y en particular de nuestro Secretario General, el compañero George Mavrikos.

Cada ataque no nos arredra, por el contrario, nos fortifica. Continúan en ascenso en “Nuestra América” las combativas batallas de trabajadores y pueblos.

No fueron pocas en las que nuestras organizaciones afiliadas participaron en las primeras filas y las que la FSM acompañó de distintas maneras enfrentándose, por disímiles métodos y vías, al incremento brutal de la represión contra el sindicalismo.

Impulsando tales acciones, hemos estado contribuyendo a la necesaria recuperación de la capacidad de lucha y de victoria de los trabajadores, ayudando al rescate del dinamismo y representatividad en la actuación sindical y también aportando a la tan necesaria unidad de la izquierda en nuestra región.

Los trabajadores, los pueblos latinoamericanos y caribeños, ganamos cada vez más conciencia de nuestros derechos y de nuestra fuerza para luchar por conquistarlos o preservarlos.

Pese a todas las agresiones sufridas, aquí estamos planteándonos – en la celebración de este 70 Aniversario de la FSM – qué hacer no solo para resistir, sino para vencer.

¡LA ACCIÓN TIENE QUE CONTINUAR CONTRIBUYENDO AL DESARROLLO DE IDEOLOGÌA!

¡VIVA LA FSM EN SU 7O ANIVERSARIO!

Ramón Cardona
Secretaría
FEDERACION SINDICAL MUNDIAL
REGION AMERICA LATINA Y EL CARIBE

A 8 años del TLC, ¡Mintieron!


El 7 de octubre del año en curso se cumplen 8 años del fraude del TLC, que nos trae a la memoria el conocido memorándum del miedo, que recogía “algunas acciones urgentes para activar la campaña del Sí al TLC”.

El memorando supuestamente creado por Kevin Casas y Fernando Sánchez era un resumen de las ideas de un grupo pequeño de políticos-empresarios, entre los que aparentemente se encuentran los 100 ticos que acumulan una tercera parte del PIB del país.

Ese memorándum del miedo del 2007, sólo por “casualidad”, se parece mucho a la estrategia de la campaña de terrorismo mediático que ha iniciado la extrema derecha contra los derechos laborales de la clase trabajadora en este 2015, ¿y en qué se parecen?, veamos:

1. “Establecer un comité de estrategia de la campaña”: atacando primero al sector médico, luego a los empleados del ICE, posteriormente a todo el sector público, finalmente, ya sin resistencias será a los trabajadores del sector privado.

2. “Construir una coalición social”: para evitar que “se convirtiera en una lucha entre ricos y pobres”; la lucha debe ser entre trabajadores, ya sea públicos o privados.

3. “Estructurar y lanzar campaña masiva en medios de comunicación”: dirigidas a “personas sencillas y con empleo precario” y sembrar “cizaña contra sus líderes, motivos, métodos”

4. “Organizar un acto multitudinario de fuerza” para “hacer sentir que somos muchos” que concretaron el pasado 26 de setiembre, que no fue nada multitudinario, a pesar de los esfuerzos de algunos medios propagandísticos.

Todo esto demuestra, una vez más, que ese grupúsculo de políticos-empresarios a través de alianzas, financiamiento político, lobby y algunos medios de comunicación de los cuales son dueños, pretenden traducir sus intereses empresariales particulares en asuntos de “interés nacional”.

Con esto logran “crear” opinión pública, poner a la ciudadanía en contra de las instituciones públicas que ellos pretenden privatizar para adueñarse de ellas.

Este tipo de campañas contra los trabajadores y las trabajadoras, así como contra la institucionalidad pública no es nuevo, hace muchos años, en la Alemania Nazi, Joseph Goebbels, propagandista de Hitler había estructurado una serie de “principios” propagandísticos para engañar, tergiversar la verdad y “dirigir” la opinión de las personas en apoyo a los intereses del régimen fascista.

Son tiempos difíciles de ataque a la dignidad de la clase trabajadora, solo con esfuerzo, unidad, compromiso y disposición de todos defenderemos nuestros derechos y el bienestar de nuestras familias.

¡Estamos avisados! ¡Todos a la jornada nacional de lucha el próximo 16 de octubre de 20015!

Martha Elena Rodríguez González
Secretaria General Adjunta UNDECA

Sindicatos del Consejo Superior de Trabajo rechazaron oferta de COMEX


Luego de un análisis cuidadoso acerca del acuerdo de asociación con la Unión Europea, la solicitud planteada por el COMEX para que el Consejo Superior de Trabajo se convierta en un ente asesor en materia laboral, la representación de los y las trabajadores en este espacio llegamos a las siguientes consideraciones:

1. Estos tratados de asociación no solo son Tratados de libre comercio, sino que van más allá del libre comercio.

2. Este modelo pretende diferenciarse de otros, evitando la expresión libre comercio e incorporando supuestamente asistencia técnica y financiera; pero la cooperación científica y tecnológica se entiende como sinónimo de privatización y propiedad intelectual y la económica encubre mayor protección a su inversión.

3. Este acuerdo aborda cuestiones más allá de los acordados en la Organización Mundial del Comercio, ya bastante rigurosos en comercio de bienes, comercio de servicios y propiedad intelectual, sino también el fomento y la protección de la inversión extranjera.

4. Incluye previsiones sobre la liberalización del comercio de servicios y regulaciones en materia de propiedad intelectual, cuyo objetivo –desde nuestra óptica- es privatizar el conocimiento y los seres vivos.

5. También, contempla la privatización de los servicios públicos mediante regulaciones específicas sobre prestación de servicios y compras del sector público (contratación pública).

6. Claro está que la elogiada “liberalización” no considera la migración de la mano de obra, sobretodo la no calificada, más bien es una estrategia de crecimiento y empleo de la UE. Nuestros países se convierten en suplidoras de materias primas para la industria europea, herencia de la división del trabajo de la era colonial. ¡Peones de un juego global!

7. Asimismo, el decreto 36157-MTSS, publicado en La Gaceta 174 del 7 de setiembre de 2010, le dio a este CST un carácter estrictamente deliberativo y consultivo, no como ente asesor.

Por tanto, estamos en desacuerdo con la propuesta gubernamental.

13 de noviembre de 2014

Manifiesta ilegalidad de nuevo reglamento para el otorgamiento de incapacidades y licencias de los beneficiarios del Seguro de Salud


Normativa profusamente reglamentarista

El nuevo reglamento, ampliamente desconocido, contiene más de cien artículos, que comprenden un conjunto de definiciones, principios, mecanismos de control, fiscalización, normas de responsabilidad profesional y un recetario de sanciones administrativas, los cuales disciplinan escrupulosamente, manu militari, el otorgamiento de las incapacidades y licencias de los beneficiarios/as del seguro de salud.

Este reglamento contiene un catálogo de definiciones, algunas excesivamente extensas, por ej. la definición de “incapacidad por enfermedad”, que llega hasta el extremo de advertir: “En ningún caso se otorgará una incapacidad a una persona sana” (art. 2).

Asimismo, un menú de principios, muchos de los cuales no son más que variaciones semánticas del mismo deber, por ej. los principios de integridad, lealtad, probidad, rectitud, veracidad, que sustancialmente disponen lo mismo y denotan el marcado acento deontológico del reglamento.

No son escasas las normas “curiosas”, entre ellas, la que dispone que fallecido el asegurado, no tiene derecho al pago de subsidio por enfermedad (art. 54).

El objetivo principal del reglamento da lugar a una desviación de poder

No hay que hacer mucho ejercicio dialéctico, entre la profusa normativa, para concluir que el objetivo principal de este reglamento, de carácter fiscalista, es restringir y reducir, al límite máximo, Derechos Fundamentales: las incapacidades por enfermedad y licencias de las aseguradas/os.

Con la finalidad de lograr el efectivo cumplimiento de este objetivo, el reglamento articula un complejo entramado de controles administrativos, mecanismos de fiscalización desproporcionados y comisiones evaluadoras con potestades discrecionales, que en definitiva, implican una regulación que por mínimo obstruye, cuando no es la más de las veces que hace impeditivo, la realización del Derecho Fundamental de la atención de la salud de los asegurados/as.

El nuevo reglamento está muy lejos de pretender la mejor satisfacción del fin público, que por lo visto son otra clase de móviles espurios los que animaron su aprobación, en demérito de la prestación eficiente y oportuna de un servicio público esencial, cuya promulgación da lugar a una desviación de poder (art. 131 LGAP).

Esta desviación de poder concurre no solo porque el fin que se pretende lesiona Derechos Fundamentales, sino también por la falta de proporcionalidad y razonabilidad de los medios establecidos para alcanzar este insidioso objetivo.

Presunción de mala fe de la actuación de los profesionales en Medicina y Odontología

La filosofía del reglamento parte de la presunción – iuris tantum – de que los médicos y odontólogos, en connivencia con los asegurados (as), promueven o realizan conductas que violentan aquellos principios éticos, con la finalidad de procurar irregularmente una incapacidad por enfermedad o licencia.

No se puede dejar de admitir que el personal hospitalario puede incurrir en abusos o irregularidades, que desde luego deben ser sancionados, pero estos casos malintencionadamente no se pueden generalizar y jamás una normativa de este tipo se puede construir partiendo del presupuesto de la actuación fraudulenta de los servidores públicos.

Penalización del sistema de incapacidades

Como el reglamento se residencia en la anterior presunción, propende, más que a controlar adecuadamente el otorgamiento de las incapacidades y licencias – tópico en que nadie está en desacuerdo -, por contrario, tiende a resaltar las responsabilidades resultantes de la relación médico-asegurado, exacerbando la responsabilidad de carácter penal, la cual impropiamente se considera inherente al acto de otorgamiento de una incapacidad (artículo 5).

Son múltiples las disposiciones que sentencian las distintas especies de responsabilidad que el reglamento “naturalmente” deriva del otorgamiento de una incapacidad, enfatizando la responsabilidad penal: “(…) sin perjuicio de la denuncia que corresponda ante la Fiscalía del Colegio de Médicos y Cirujanos de Costa Rica o al Ministerio Público”, advertencia que es moneda de curso común en el reglamento.

Restricción ilegítima del ejercicio profesional y enervación del acto médico

El reglamento determina, en términos generales, de manera preceptiva los restrictivos periodos de incapacidad por enfermedad que pueden prescribir los profesionales en Medicina, en los servicios de Medicina General y especialistas, más de allá de los cuales se requiere necesariamente la autorización de la jefatura del servicio y en otros casos, la autorización de la comisión local evaluadora de las incapacidades y licencias.

Esta limitación coercitiva del periodo de otorgamiento de las incapacidades constituye una ilegítima restricción del acto médico, que de toda manera esta materia no puede regularse en un reglamento autónomo de servicio.

Por otra parte, se enerva el acto médico, porque las incapacidades que requieren un periodo que excedan estos límites determinados reglamentariamente, tienen que ser autorizadas, de previo, por la jefatura del servicio, y en otros casos tienen que ser autorizadas por la comisión local evaluadora de incapacidades, que posee potestades ilimitadas para modificar o anular la incapacidad.

La autorización que se exige, ya sea de la jefatura inmediata o la comisión local evaluadora, configura un acto de control o fiscalización ilegítimo, absolutamente incompatible con el ejercicio de esta profesión, que desnaturaliza el acto médico, violentándose el criterio científico que entraña este acto profesional.

Afectación de los Derechos Fundamentales de los y las aseguradas

Lo más grave de todo esto es que el trabajador y trabajadora quedan entrampados en este enmarañado procedimiento de autorizaciones, controles administrativos y mecanismos de referencias y contrarreferencias de un nivel de atención de salud a otro, en detrimento de su derecho a la atención de la salud y del otorgamiento de una incapacidad por enfermedad, que por lo demás, no se tratan de derechos ordinarios, sino de Derechos Fundamentales.

Además, se violenta el derecho fundamental al buen funcionamiento de los servicios públicos, que la jurisprudencia constitucional ha inferido de nuestra Constitución Política, cuya exigencia es más intensa tratándose de un servicio público esencial, que mucho menos admite estas ostentosas restricciones (voto 5177-2004).

Violación del principio de igualdad en menoscabo de los y las trabajadoras de la CCSS

La CCSS presta un servicio público esencial, sujeto a los principios de continuidad, eficiencia, adaptación e igualdad de trato, por lo menos en buena teoría constitucional y legal, que lamentablemente dista mucho de la cruda y cotidiana realidad (art. 4 LGAP).

No obstante, el reglamento contiene normas de excepción, en perjuicio de los trabajadores/as institucionales, particularmente la que establece que “toda incapacidad otorgada en el servicio de urgencias o consulta externa a funcionarios institucionales que se encuentren laborando en el mismo centro, debe ser autorizada por la jefatura de dicho servicio o quien esté a cargo por delegación de la dirección médica y se debe ajustar a lo establecido en el párrafo tercero del art. 38 de este Reglamento (…)”.

No se justifica, de ninguna manera, que solo por la condición de ser funcionarios institucionales, una incapacidad por enfermedad que se otorgue en estas circunstancias, tenga que someterse a ese engorroso trámite administrativo.

No existe ningún motivo objetivo que justifique este trato desigual, discriminatorio, que convierte a estos servidores de la salud en asegurados de segunda o tercera categoría, expuestos, día a día, a un nivel de riesgo de contaminación o infección mayor que cualquier otro trabajador.

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Lic. Manuel Hernández Venegas
Asesor legal de UNDECA

Publicado en Diario Extra
Viernes 19 de Septiembre del 2014

Sala IV rechaza acción de inconstitucionalidad interpuesta por sector empresarial y una Confederacion Sindical


Esta ley establece la representación paritaria de ambos sexos en los órganos de gobierno de asociaciones, asociaciones solidaristas, sindicatos y asociaciones de desarrollo comunal.

Lo más deleznable fue que una connotada Confederación Sindical del país, siguiendo el ejemplo de las cámaras patronales, se haya sumado a este espurio esfuerzo, que compartiendo las mismas razones del empresariado, impugnó también la constitucionalidad la Ley de Paridad de Género.

Por lo visto, no son muchas las discrepancias que diferencias esa confederación sindical y el empresariado costarricense, que se hicieron una sola mancuerna para enervar la participación de las mujeres en aquellas organizaciones.

UNDECA promovió una intensa y amplia campaña, a nivel nacional, para defender la Ley de Paridad.

Esta campaña, por dicha, contó con el apoyo de un conjunto de organizaciones gremiales que se apersonaron y combatieron los argumentos patriarcales que defendieron los empresarios y aquella Confederación.

La Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, en la sentencia N° 2014-004630, declaró sin lugar la acción de inconstitucionalidad.

El Tribunal Constitucional resolvió que la Ley de Paridad contiene medidas de acción afirmativa, necesarias para promover la participación de las mujeres, que está muy lejos de quebrantar el principio de igualdad y la libertad de asociación sindical, que fueron los argumentos utilizados infructuosamente por aquella cúpula empresario-sindical para traerse al suelo esta importantísima ley.

Desde luego, avergüenza, aunque sea vergüenza ajena, que una Confederación Sindical haya compartido con la representación empresarial semejante intentona de anular la participación de las mujeres en los sindicatos y otras asociaciones.

De la élite patronal, que no tiene la menor consideración de la dignidad de la clase trabajadora costarricense, no podríamos esperar una cosa distinta.

Unión Nacional de Empleados de la Caja y la Seguridad Social
UNDECA

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El pueblo fue claro en su mensaje para cambiar las prácticas irregulares de los gobiernos anteriores, especialmente en cuanto al manejo de las concesiones. Es por eso que el BLOQUE UNITARIO SINDICAL Y SOCIAL solicitamos declarar nulo el contrato que se firmó con la APM Terminals; para terminar con ese camino viciado, que violenta la Constitución Política, la independencia de poderes y atropella el bloque de legalidad y los derechos de las y los trabajadores. Ejemplos:

• Cláusula 9.1. Crea un monopolio Inconstitucional al otorgar hasta por 50 años a la APM Terminals la exclusividad en el manejo de los contenedores. Violenta los artículos 140 y 121 Constitucionales.

• Cláusula 11.8. Encarece los servicios portuarios, ya que ARESEP le aprobó a la APMT una tarifa cara de $266. Hoy JAPDEVA cobra $117 en Puerto Limón y tan solo $17 en Puerto Moín.

• Cláusula 8.3. Subdivide en 5 etapas la construcción de la supuesta mega obra de 1500mts. de muelle, comprometiéndose la empresa APMT realmente sólo a construir 600mts., y el resto 6 meses antes de terminar la concesión (o sea dentro de 50 años). Pero eso sí, cobrando desde ya la tarifa completa como si hubiera hecho toda la inversión.

• Destrucción Ambiental. Pone en riesgo los mantos acuíferos, el agua, el Humedal Nacional Cariari, el Río Moín; y varias especies de flora y fauna protegidas y en peligro como las tortugas baulas, manatíes, delfines, entre otros. Ya que se pretende construir una mole de cemento de 80 hectáreas en el mar.

• Irrespeto a Competencias. Deja sin contenido las potestades de ley que tiene JAPDEVA, y las pasa vía contrato a la APMT con todo y la carga de contenedores. Entrega la explotación de 80 hectáreas de mar y su riqueza, sin haberse aprobado una ley en la Asamblea Legislativa que es a la que le compete estas decisiones.

• Otras Anomalías. Solo hubo un “oferente” que exigió la exclusividad bajo amenaza. Se postergó 13 veces la fecha límite de recepción de ofertas: la fecha 8 se publica 4 días después y la fecha 9 se publica un mes después de vencido el plazo vigente para recibir ofertas. En vez de declararse desierto se le adjudicó a la APMT. Después de adjudicado se le otorgan 15 regalías adicionales a la APMT.

• Política Salarial. El contrato no contempla nada respecto a política salarial.

No podemos seguir lesionando la soberanía Nacional en claro beneficio de intereses egoístas extranjeros, y en perjuicio de los ciudadanos ticos. ¡El pueblo costarricense repudia esta gran impostura, corrupta, antinacional y antipatriótica!

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Bloque Unitario Sindical y Social