La Federación Sindical Mundial que es la voz militante de 92 millones de trabajadores en 126 países de cada rincón del mundo, cumpliendo con sus principios fundamentales, siempre y firmemente ha estado a lado de los trabajadores donde quiera que vivan, trabajan o sufran por la barbarie capitalista. De esta manera, es nuestro deber internacionalista defender a los intereses de los trabajadores y denunciar las manipulaciones de los empresarios que quieren acabar con nuestros derechos laborales y conquistas sociales.
Con estas reflexiones proseguimos, en junio pasado, a la presentación de una queja en relación a la reforma laboral, dirigida a la Comisión de Expertos en Convenios y Recomendaciones de la Organización Internacional de Trabajo, solicitando que la Oficina haga llegar nuestra petición a dicha Comisión de Expertos, para que dicha Comisión emita su pronunciamiento sobre nuestra solicitud. La designación de una Comisión de Encuesta para Chile, en relación con las graves y reiteradas violaciones del Gobierno de Chile sobre los Convenios números 87 (sobre la libertad sindical y protección del derecho de sindicación), 98 (sobre derecho de sindicación y de negociación colectiva), 151 (sobre relaciones de trabajo en la administración pública), 135 (sobre los representantes de los trabajadores) y 103 (sobre la protección de la maternidad de la OIT), podría constituir una protección efectiva de los derechos de los trabajadores chilenos; de los trabajadores de un país que ha ratificado los convenios supracitados de la OIT.
Nuestros delegados que quisieron depositar la queja, desde el primer momento se sometieron a duras presiones por parte de varios agentes; embajadas, empresarios, burócratas, todos querían evitar la formación de una Comisión de encuesta y sus repercusiones internacionales. A pesar de ello, nuestros dirigentes sindicalistas no se han rendido; siguieron firmemente a la protección de los intereses de la clase trabajadora e ignoraron las diversas presiones.
Ahora, estamos enfrentados con varias manipulaciones por parte de algunos círculos de la OIT que decidieron que la queja no se remitiera a una Comisión de Encuesta y que se diera por terminado el procedimiento incoado. Además, demostrando una vulneración grave de los principios que rigen la OIT, no invitaron a los firmantes de la queja y ni siquiera les enviaron la respuesta de Chile.
Por eso, denunciamos ante la opinión pública esa actitud que trata de evitar que la violación de los Convenios ratificados por Chile se trate y que se resuelvan las reiteradas violaciones. De manera arbitraria quieren generar dilaciones acerca del tratamiento de la reclamación y silenciar la voz de los trabajadores chilenos.
Nosotros les preguntamos: ¿Por qué tienen miedo si la situación de Chile es tan buena? Tal vez, el 90% de todos los trabajadores de Chile que se dejan sin poder negociar, tenga una opinión contraria. Por lo tanto, hacemos un llamamiento al Consejo de Administración de la OIT a respetar la voz de los trabajadores y a estar a la altura de las circunstancias en un momento en que la clase trabajadora mundial está experimentando una arremetida sin precedentes.
Secretariado de la FSM