Con la privatización de los 36 Ebais y el cierre de 9 que administraba la Universidad de Costa Rica (UCR) en convenio con la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), el gobierno empresarial de Liberación Nacional da un paso más hacia la destrucción de la salud pública.
Son muchos los actos de corrupción, ampliamente documentados e informados por la prensa nacional, en los cuales miles de millones de colones de la seguridad social han sido robados sin que hasta la fecha se pudiera recuperar nada. Son miles de millones de colones que adeuda tanto el Gobierno central como el Estado y los grandes empresarios. Son miles de millones de colones despilfarrados en compra de equipos inservibles, construcción deficiente de edificios, alquiler de edificios y consultorías privadas, miles de millones que pagamos todos y todas las costarricenses, que nunca se recuperarán.
Nada justifica la privatización de servicios de salud, ni siquiera desde el punto de vista financiero, está demostrado en los costos de los Ebais del Proyecto PAIS administrados por la UCR y lo que van a tener que pagarle a la empresa privada universitaria que atenderá a menos personas y brindará menos servicios.
Pero contrario a una buena y eficiente administración, lo que buscan es privatizarlo todo, destruir a la Caja mediante concesiones y privatizaciones.
La huelga de los y las trabajadoras de los Ebais de Montes de Oca, Curridabat y La Unión es una acción legítima de defensa de los servicios de salud públicos y en defensa legítima de su derecho al trabajo.
La entrega de estos Ebais a una empresa privada de educación que NO TIENE ninguna experiencia en salud, y mucho menos en salud pública, no es más que la aplicación de un modelo que ha demostrado, en muchos países, que es cruel e inhumano. Estados Unidos de América es un ejemplo de ello, más de 50 millones de personas no tienen derecho ni a una pastilla para el dolor de cabeza, mucho menos a operaciones o trasplantes, miles mueren en la calle porque las empresas privadas de salud no los atienden si no pagan, Obama está en una encrucijada tratando de imponer el servicio público mínimo de salud para esos más de cincuenta millones de personas. Pero también están los ejemplos de Colombia, Alemania, España y muchos países más.
Por eso la defensa de los Ebais, que el gobierno liberacionista y su representante en la Presidencia Ejecutiva de la Caja pretenden entregar a la empresa privada, es fundamental para la defensa de la salud pública en Costa Rica. Es tan solo “la punta del iceberg”, el objetivo son todos los Ebais del país.
El negociazo no es nada despreciable, son miles de millones que pasarán al bolsillo de unos cuántos, a costa de la enfermedad de más de 190 mil personas de esas tres zonas del país y muchos miles de millones más por todos los centros de salud pública.
La defensa de la salud es la gran lucha del pueblo costarricense, se debe dar ya!, antes de que sea tarde.